LA LÁMPARA DE LA VERDAD

25-4-11

-Madre: Qué lámpara más bonita, verdad cariño.
-Padre: Si pero es muy frágil, deberíamos forrarla con algo hasta que la colguemos.
-Madre: No hace falta nuestros hijos son muy tranquilos, pero bueno, es mejor prevenir...
-Hijo 1: ¿Qué pasa?
-Madre: Nada, ahora portaros bien, nos vamos a comprar algo para la lámpara.
-Hijo 2: Está bien mamá.
-Padre: Adiós.
-Hijo 1 y 2: Adiós.

(Pasa un rato)

-Hijo 2: Me aburro, vamos a jugar con el balón.
-Hijo 1: ¡No!, mamá nos puede reñir si rompemos la lámpara.
-Hijo 2: Vale pero me sigo aburriendo. ¿Qué hacemos?
-Hijo 1: Ya lo tengo, (suena un chasquido) jugaremos con los perritos de peluche.
-Hijo 2: Buena idea, voy a buscarles.

(Los niños empiezan a lanzarse los perritos y... )

-Hijo 1: ¡Cuidadoooooo! , no puedo parar al perro.
(Da a la mesa donde está la lámpara y  se cae)
-Hijo 2: ¡La lámpara!
-Hijo 1: ¡No,  cógela!
-Hijo 2: Se ha roto.
-Hijo 1: ¡No me digas, en que te has figado! Lo recogeré.

(Se abre la puerta)

-Hijo 1 y 2: Mama, Papa.
-Mama: Hola ,¿Y la lámpara?
-Hijo 1: Veras…se nos ha   roto. Estábamos jugando y...
-Mama: ¡Menuda Faena!, vais a tener que ahorrar de vuestra propina para ayudarnos a comprar otra. Pero habeis hecho bien en decirme la verdad .
-Hijo 1: Gracias, eres la mejor.
                    Sandra Merino, 4º B
¿Qué habrías hecho tú, decir la verdad de cara o esconderla hasta ser descubierta? Puedes dejarnos tu comentario sin compromiso...